Las mejores herramientas para comprobar la velocidad de lectura USB en 2025

¿Alguna vez te ha pasado que al transferir archivos grandes a o desde una memoria USB, el proceso se vuelve desesperantemente lento? A pesar de que en el envase de tu pendrive o disco externo te prometen velocidades de vértigo, la realidad puede ser muy distinta. Por suerte, existen numerosas formas de comprobar qué tan rápido es realmente tu dispositivo USB. Y no, no hace falta ser un experto en informática para hacerlo.

Este artículo recopila las mejores herramientas y métodos disponibles en 2025 para verificar la velocidad de lectura y escritura de una USB. Además, te explicamos por qué algunos dispositivos son más lentos de lo normal y cómo puedes optimizar su rendimiento para sacarles el máximo provecho. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para analizar a fondo cualquier unidad USB desde tu ordenador, tanto en Windows como en Linux. ¡Vamos al lío!

¿Por qué importa la velocidad de una memoria USB?

La velocidad de transferencia de una unidad USB es esencial si trabajas con archivos grandes, haces copias de seguridad o necesitas instalar sistemas operativos desde un USB. Cuanto más alta sea esta velocidad, menos tiempo perderás esperando a que se completen las transferencias.

Además, en un mercado saturado de dispositivos económicos, es común encontrarse con productos que prometen más de lo que ofrecen. Muchas unidades están falsificadas o utilizan memorias de baja calidad que empiezan funcionando bien pero su rendimiento se degrada en pocos usos. Por eso, comprobar su rendimiento real no es opcional, es imprescindible.

También influye mucho el tipo de puerto USB al que conectes el dispositivo. Un USB 3.0 puede funcionar a velocidades muy por debajo de sus posibilidades si lo conectas a un puerto 2.0. El tipo de sistema de archivos que uses en la unidad (FAT32, NTFS, exFAT o EXT4) también tiene un fuerte impacto en el rendimiento.

Software gratuito para medir la velocidad de una memoria USB

Existen numerosas aplicaciones gratuitas para saber cuán rápido es un pendrive o disco externo. Aquí te recopilamos las más completas, populares y fiables que sirven tanto para realizar benchmarks detallados como para detectar errores o componentes falsificados.

EaseUS Partition Master es una de las herramientas más recomendadas y versátiles. No solo sirve para medir la velocidad de lectura y escritura de tu USB, sino también para analizar su estado de salud, reparar sectores defectuosos o gestionar particiones. Es muy fácil de usar y genera informes visuales muy completos.

Incluye una función llamada «Prueba de Rendimiento del Disco», accesible desde su sección «Descubrimiento». Además, es totalmente gratuita para uso personal y compatible con Windows 11, 10, 8 y 7.

Otra opción muy popular es USB Flash Benchmark. Esta utilidad ligera y sin instalación permite hacer pruebas desde bloques de 1KB hasta 16MB. Presenta resultados en forma de gráficos y es muy precisa, aunque puede tardar unos minutos en completarse. Ideal para usuarios más experimentados.

CrystalDiskMark es otro clásico entre las utilidades de testeo de discos. Su punto fuerte es la posibilidad de personalizar la prueba: tamaño de archivo, número de repeticiones o tipo de acceso (secuencial o aleatorio). Ofrece una interfaz muy sencilla de entender y es útil tanto para USB como para SSDs y HDDs.

USBDeview va un paso más allá: no solo mide la velocidad, también muestra todos los dispositivos USB conectados (actuales o anteriores), y te permite desinstalarlos. Es portátil y funciona en cualquier versión de Windows. También permite comparar resultados con los publicados por otros usuarios.

Check Flash destaca por ofrecer funciones de diagnóstico más avanzadas. Permite comprobar sectores defectuosos, guardar imágenes de la unidad y realizar pruebas intensivas, aunque puede ser un poco más técnico y no tan recomendado para principiantes.

SpeedOut es una joya para quienes buscan una herramienta sencilla que funcione sin permisos de administrador. Es portátil, ligera, directa y muy rápida. Muestra resultados de lectura y escritura en apenas segundos y no requiere instalación.

RMPrepUSB permite hacer una prueba de velocidad mediante escritura/lectura de bloques de 65 MB. Es ideal para usuarios avanzados y también sirve para formatear unidades o crear medios de arranque. Eso sí, puede borrar tus datos si no tienes cuidado, así que haz siempre una copia de respaldo antes de usarlo.

Cómo medir la velocidad USB desde Linux

Si prefieres usar Linux, también tienes formas sencillas y eficaces para comprobar el rendimiento de tu memoria USB directamente desde la consola, sin instalar programas adicionales.

El comando “dd” sigue siendo la forma favorita de los usuarios avanzados para estas pruebas. Aquí tienes un ejemplo:

dd if=/dev/zero of=./testfile bs=4k count=262144 status=progress

Con ello se creará un archivo de 1GB lleno de ceros. Al terminar, verás en la consola cuánto ha tardado y la velocidad media de escritura. Para medir la lectura, primero deberás vaciar la caché:

sudo sh -c "sync && echo 3 > /proc/sys/vm/drop_caches"

Luego puedes hacer la lectura:

dd if=./testfile of=/dev/null bs=4k status=progress

Resultados superiores a 100 MB/s en lectura y más de 25 MB/s en escritura ya son bastante buenos para pendrives USB 3.0. Algunos modelos de gama alta pueden superar los 150 MB/s en lectura sin problemas.

¿Qué afecta a la velocidad de transferencia de una memoria USB?

No todo depende del pendrive o disco externo. Hay varios factores que influyen directamente en las velocidades reales de transferencia:

• Tipo de puerto: USB 3.1 es significativamente más rápido que USB 2.0. Asegúrate de usar entradas azules o con el símbolo SS (SuperSpeed).
• Sistema de archivos: FAT32 es más lento, especialmente con archivos grandes. NTFS y exFAT ofrecen mejor rendimiento, y EXT4 en Linux también destaca.
• Calidad de la memoria flash: Unidades baratas usan chips de lenta velocidad aunque se etiqueten como USB 3.0.
• Configuración del sistema operativo: Opciones de ahorro de energía o de caché pueden limitar el rendimiento del puerto USB.
• Virus o sectores dañados: Pueden reducir drásticamente la velocidad de transferencia.

También puedes desfragmentar la unidad o activar la escritura en caché para obtener un extra de rendimiento, especialmente en dispositivos más antiguos.

Comparativa de herramientas para medir velocidad USB

Dependiendo de lo que necesites, unas herramientas te darán más información que otras. Aquí tienes un resumen rápido:

• EaseUS Partition Master: Todo en uno, ideal para principiantes. Test, diagnóstico y mantenimiento.
• CrystalDiskMark: Muy detallada, ideal para comparar unidades con distintas configuraciones.
• USBDeview: Ideal para gestionar dispositivos conectados y compartir resultados.
• SpeedOut: Muy rápida, simple y sin complicaciones. Perfecta para una prueba rápida.
• Linux dd + Gnome Disks: Ideal para usuarios técnicos que deseen resultados precisos sin uso de software externo.

Consejos para acelerar una memoria USB lenta

Si las velocidades no se ajustan a lo prometido por el fabricante, hay varias formas de intentar mejorarlas:

• Formatea la unidad usando NTFS o exFAT. Estos sistemas de archivos ofrecen mayor rendimiento con archivos grandes.
• Actualiza los controladores USB de tu ordenador. Especialmente si tienes un equipo con sistema operativo antiguo o drivers genéricos.
• Evita puertos USB frontales, especialmente en PCs de sobremesa. Conecta tu pendrive directamente a la parte trasera del ordenador.
• Desactiva el ahorro de energía en puertos USB desde las opciones de energía del sistema.
• Limita las tareas simultáneas durante transferencias. Cerrar programas y descargas puede ayudar.

Tener una unidad USB rápida no solo mejora tu productividad, sino que también hace más eficientes instalaciones, transferencias o trabajos desde equipos portátiles de emergencia.

Medir la velocidad de una memoria USB es más sencillo de lo que parece. Con cualquiera de las herramientas mencionadas —ya sean para Windows o Linux— puedes obtener un análisis detallado de lectura y escritura, identificar unidades lentas o defectuosas, y tomar decisiones informadas antes de guardar archivos importantes. Ya sea para comparar tus diferentes pendrives o simplemente para optimizar la transferencia de datos, saber con qué velocidad cuentas puede marcar una gran diferencia.

[relacionado url=»https://www.blusens.com/ipad/»]